De una forma indirecta, las presiones pueden evaluarse a partir de la red de flujo del talud o la ladera. Este procedimiento da los valores de la presión en distintos puntos de la superficie de ruptura. Figura 2. Red de flujo en un talud. Ejemplo de altura piezométrica pertinente a un punto A (Ingeniería Geológica). Donde "z" es la altura de la columna de agua y "γw" el peso específico del agua (en dependencia de la anisotropía en la permeabilidad de los materiales del talud y de las peculiaridades del flujo, esta hipótesis puede suponer fallos esenciales). Propiedades geomecánicas de los suelos. La posible ruptura de un talud o ladera a favor geotecniaymecanicasuelosabc.com/ensayos-de-mecanica-de-suelos-en-valparaiso-san-felipe de una determinada superficie depende de la resistencia al corte de exactamente la misma.

Sólo una parte del agua de lluvia o escorrentía penetra en el terreno, y una mínima parte alcanza el nivel freático. Si bien la modificación del nivel freático obedece por norma general a cambios lentos y periodos largos, en el caso de materiales muy permeables puede llegar a generarse un ascenso relativamente veloz como consecuencia de precipitaciones intensas puntuales. Además del agua en el interior del terreno, hay que considerar el papel del agua superficial (por precipitaciones, escorrentía, etc.), que puede crear problemas esenciales de estabilidad al crearse fuertes presiones en las discontinuidades y fisuras por las que se introduce, y en la zona más superficial del terreno; en verdad, las roturas en taludes en suelos son más usuales en periodos de lluvias intensas, tras una fuerte tormenta o en épocas de deshielo.